El primer proyecto será el de Orro, donde se transformará el firme, la iluminación y el mobiliario urbano. Además, se renovará el lavadero, un espacio que suponía un punto de reunión para los vecinos
En Culleredo no se olvidan del rural. Las parroquias que forman parte del Concello y los vecinos que residen en ellas tienen las mismas necesidades y exigen los mismos servicios que quienes habitan en el núcleo urbano. Por eso desde el gobierno local se han propuesto para el actual mandato como una de las grandes prioridades la modernización del entorno urbano de Culleredo. Siguiendo esa línea, el ejecutivo local ha desarrollado un plan específico para impulsar la regeneración del centro neurálgico de cada parroquia del rural para conferirles una imagen y elementos comunes como marca de identidad.
El Concello ya cuenta con el primer diseño de lo que supondrá el plan. Se trata del proyecto de humanización del centro de Orro. Allí se transformará íntegramente el firme, la iluminación y el mobiliario urbano, una modernización que se pretende realizar en el resto de las parroquias. Además, en el caso de Orro, el Concello prevé la instalación de un suelo característico y la colocación de bancos, papeleras, guarda contenedores, árboles, zonas verdes y un punto de desinfección. En este proyecto también se aprovechará para renovar el lavadero, un espacio tradicional que servía de punto de reunión de los vecinos. La modernización del núcleo rural se completará con el diseño de una señalética nueva que informe y visibilice el nombre de la parroquia y el núcleo concreto. Para ello, se contará con señalización vertical que dé cuenta de los puntos de interés con los que cuenta la zona.
El alcalde, José Ramón Rioboo, avanza que será un plan con el que «conseguiremos poner en valor nuestro rural, ya que es una de nuestras principales señas de identidad». El primer edil señala que la unificación de criterios posibilitará crear «espacios característicos» de cada zona. El gobierno local apunta a lugares, además de Orro, como Boedo, Bregua, Castelo, Celas, Ledoño, Sueiro, Sésamo, Almeiras, Castro Laxe o Peiro como algunos de los primeros en proyectar el cambio.